Restauración de carruaje Landau, construido por Henry Binder, en el siglo XIX. Completa restauración histórica mediante procesos artesanales por Carruajes Romero.
Descripción e introducción historica
Este tipo de carruaje es original de la ciudad de Landeau en Alemania de la cual recibe su mismo nombre.
A final del siglo XVIII empiezan a aparecer estos primeros modelos de carruajes, con caja cuadrada y también con la caja redonda, al ser denominado carruaje de lujo era muy utilizado en grandes ceremonias e incluso en Casas Imperiales.
Fue en el año 1850 en Francia donde se empezó a perfeccionar su forma y más adelante en Inglaterra, donde a partir de esa fecha se convirtió en unos de los carruajes más usados en todo tiempo, descubierto en verano y cubierto en invierno.
Las capotas se abren y cierran con gran facilidad hacia delante y hacia atrás y quedando completamente hermética la caja, es por eso que se solía viajar incluso los días de lluvias.
Estado de conservación y diagnosis
Para poder realizar el diagnóstico del estado de conservación y determinar los factores de alteración y patologías en este proyecto, se realizaron, en una primera fase, los debidos estudios de investigación histórica junto con los métodos físicos de examen por imagen que nos permitieron llegar a la conclusión de que la pieza se encontraba en un lamentable estado de conservación con problemas que incluso estaban poniendo en peligro la integridad de la misma.
Existe una gran acumulación de polvo y suciedad en toda la superficie con una clara oxidación de los herrajes en los estribos y barandillas de asientos con suciedad en general y oxidación en el resto de los metales.
Toda la superficie de pintura de fondo se encuentra deteriorada con faltas en capa de preparación que deja la madera sin protección. Repitente y no se aprecia visión del escudo de su primer propietario de época que se encuentra en las caras de los laterales, por el paso del tiempo.
Existen fisuras en toda la pieza, que evidencian una clara inestabilidad en las uniones de la madera y son focos de pudrición de esta ya de por si claramente afectada por el ataque de insectos xilófagos. Todo esto provoca que el bastidor este muy debilitado y no cumpla adecuadamente con la función sustentante que le es propia.
Finalmente se aprecia un envejecimiento generalizado del material, con altos niveles de fragilidad y desgaste del material de aletines, salpicadero y capotas, como consecuencia de los cambios de temperatura y desgaste por su uso, siendo altamente visible roturas y perdidas de diversos puntos de costuras en pliegues de capota.
Proyecto de restauración
La propuesta de actuación se aborda bajo el principio de conservación material y recuperación completa de la funcionalidad del vehículo, pero respetando su autenticidad, a través de una actuación mínima en cuanto a su reintegración material y cromática, respetando en todo momento los principios fundamentales a tener en cuenta en cualquier actuación: estabilidad, reversibilidad y discernibilidad
El proceso se ha iniciado con el traslado del carruaje a los talleres de conservación-restauración, donde, tras una primera inspección ocular, se ha llevado a cabo un estudio pormenorizado del mismo, incluyendo análisis de muestras y la reproducción fotográfica mediante técnicas de luz natural, rasante y ultravioleta, comparándose con el estudio histórico y técnico correspondiente.
Se realiza todo el proceso de tratamiento de caja, eliminado el polvo mediante limpieza mecánica con los debidos ajustes de los metales y procediendo a dar imprimación y pintar con los colores azul y negra fileteada en rojo, incluyendo las puertas de los laterales.
Se realiza todo el proceso de tratamiento de las ruedas en el que se abordan diferentes tratamientos específicos de limpieza para el metal y pintura para la completa reintegración volumétrica y cromática del estrato pictórico en color rojo y fileteadas en azul.
Siguiendo la misma metodología y criterios de restauración se completa el tratamiento de los bajos consolidado todo el herraje mediante el tratamiento de las áreas oxidadas por chorreo de arena e iniciando el proceso de reintegración cromática sobre una base de color rojo cortado en negro y fileteado en azul y para finalizar con la aplicación de un barnizado que permita recuperar los tonos originales al mismo tiempo que protege a la pieza de cara al futuro.
Tras completar los debidos tratamientos para los faroles, lanzas y balancines se da por concluido el proceso de intervención superando el objetivo principal del trabajo, describiendo paso por paso cada proceso de la restauración para que del carruaje “Omnibus” volviese a recuperar su estética y funcionalidad.
