Carruajes Romero

Cuidados y Almacenamiento

Cuidados del Carruaje

Ubicación y Almacenamiento

Durante la época en la que los coches de caballos eran la forma más habitual de transporte, disponer de un lugar correcto donde conservarlos, junto con sus guarniciones y accesorios, era algo muy importante.

Las empresas de transporte tenían espacios adecuados para guardar sus vehículos, salas específicas para las guarniciones y lugares para realizar los mantenimientos y la limpieza, separando, mediante puertas, los establos para mantener fuera la suciedad y el polvo. Estos edificios estaban siempre bien ventilados y tenían superficies interiores lisas que eran fáciles de limpiar.

Hoy en día, pocos propietarios disponen de este tipo de instalaciones dedicadas, sin embargo, los carruajes de hoy, ya sean reproducciones modernas o antigüedades restauradas, incluidas sus guarniciones, aún requieren un cuidado y mantenimiento adecuados, ya sea que estén guardados en un garaje, un sótano, una nave industrial o una cochera especialmente construida para su almacenamiento.

Los carruajes y las guarniciones tienen partes hechas de diferentes materiales (madera, metal, cuero, tela, pintura) que no reaccionan de la misma manera con el medio ambiente. Encontrar formas de hacer frente al medio ambiente para evitar el deterioro de estos diversos materiales es todo un desafío para el coleccionista.

Y recuerde que uno de los mejores procedimientos de mantenimiento preventivo para preservar los carruajes es mantener el área donde se guardan siempre limpia. Esta práctica conservará su carruaje mucho más tiempo que cualquier producto de limpieza milagroso.

Carruajes Romero

Mantenimiento del Cuero

y la Tapicería

Los guardabarros, salpicaderos, aletines, los revestimientos de los ejes, los extremos de la lanza y otras partes que contengan cuero en el carruaje deben limpiarse, acondicionarse y pulirse para permitir su correcta nutrición e hidratación.  Recuerde que los carruajes con capotas plegables deben almacenarse con las capotas levantadas, pero no extendidas a su extensión completa, abriendo con frecuencia otras partes del carruaje que contengan pliegues en el cuero.

Retire los asientos y limpie el fondo y otras partes cubiertas donde se acumule la suciedad y los roedores puedan anidar. Para limpiar la tela, use una aspiradora con un accesorio de tapicería o un cepillo suave de crin. Si está limpiando textiles históricos de carácter frágil, coloque una pantalla de nylon sobre la tela mientras la aspira para evitar daños.

Mantenimiento de las partes

de madera y herrajes

¡Nunca guarde el carruaje sucio! No nos cansamos de decirlo. Elimine el barro y la suciedad con agua mediante el chorro suave de una manguera o exprima una esponja grande sobre el carruaje para dejar que el agua fluya sobre la suciedad.

Trabaje siempre de arriba abajo, limpiando las ruedas y ejes al final para evitar que la esponja recoja piedras que puedan dañar la superficie.

Elimine el polvo seco con una aspiradora a ser posible usando algún accesorio en forma de cepillo muy suave. Recuerde, comience desde arriba y trabaje hacia abajo.

Use el tubo prolongador de la aspiradora para llegar a las esquinas.  Es importante utilizar una aspiradora de buena calidad con un motor de una potencia aproximada de 1.5 hp. Evite utilizar un aspirador industrial que emita polvo fino por el escape. Lo más recomendable es utilizar una aspiradora portátil, tipo mochila o con correa para el hombro, que pueda facilitar el movimiento alrededor o entre los diferentes carruajes de su colección.

Después de pasar la aspiradora, limpie el carruaje con una gamuza sin pelusa o un paño desinfectante añadiendo algún producto para el mantenimiento del automóvil que le pueda ayudar a reducir la electricidad estática que atrae el polvo.

Mantenimiento de las partes

metálicas y la pintura

Las partes metálicas de un carruaje pueden deslustrarse (herrajes de latón o plata) u oxidarse (ejes de acero o de hierro, resortes, etc.).

Para tratar el deslustre, use una pequeña cantidad de un pulidor de metal ligeramente abrasivo. Tenga cuidado de no dejar que el esmalte penetre en los materiales circundantes. Aplique el esmalte con un paño fino y frote abundantemente.

Una vez terminado el proceso, asegúrese de que todos los residuos producidos por el pulimento son limpiados.

Finalmente aplique una pequeña cantidad de cera micro cristalina para retardar el deslustre.

Tenga siempre una lata pequeña de pintura negra con un pequeño pincel a mano para retocar peldaños, acoplamientos y otras partes que se desgastan constantemente. Aplique siempre una capa tan fina como sea posible.

Tenga siempre presente que este tipo de vehículos históricos suelen estar pintados con muchas capas de pintura provenientes de muchos medios diferentes.

Finalmente, para ayudar a mantener la pintura en buenas condiciones, limpie su carruaje con cuidado para evitar rayones, almacene los coches de caballos adecuadamente en un área limpia, lejos de la luz solar directa, los cambios extremos de temperatura y la humedad inadecuada, y siempre maneje los carruajes con cuidado cuando los transporte.

Mantenimiento de las ruedas

del coche de caballo

Un buen mantenimiento de las ruedas es siempre un requisito previo para una conducción segura. El primer paso para el correcto mantenimiento de las ruedas es determinar sin las ruedas utilizan tuerca de eje único lubricada con grasa (muy común en carruajes de peso ligero) o ejes cilíndricos (tipo “Collinge” o “Mail”) lubricados con aceite, no con grasa. Tenga en cuenta que la aplicación de grasa a un eje del tipo Collinge puede hacer que la rueda se “congele”.

Los ejes deben limpiarse a fondo, aplicando grasa o aceite con frecuencia, y siempre después de que el carruaje haya sido conducido sobre una superficie arenosa durante un período de tiempo prolongado.

Finalmente tener un “gato” para carruajes le facilitara enormemente el proceso de levantar cada rueda para extraerla, inspeccionarla, limpiarla y lubricarla.

Mantenimiento de las partes

con mimbre en el carruaje

Debido a que el mimbre puede volverse frágil y débil, los coches de caballos con partes de mimbre deben almacenarse siempre fuera de la luz solar directa, reparándose cualquier agujero que se detecte en el mimbre tan pronto como sea posible para evitar un mayor deterioro.

Por otro lado, tanto el mimbre en su estado natural como el pintado deben limpiarse siempre con agua y jabón frotándolos con una esponja (tenga en cuenta no frotar la esponja sobre el mimbre con excesiva fuerza ya que podría dañarlo).

Mantenimiento contra el polvo

en el carruaje

El polvo es uno de los peores enemigos para el carruaje ya que absorbe la humedad y puede causar moho en la superficie, incrustándose en la tela y dañando la tapicería. Además, debido a que el polvo es abrasivo, la simple acción de limpiar un carruaje polvoriento puede llegar a rayar la superficie.

Las cubiertas anti polvo son una buena solución que pueden ayudarnos a protegernos de este problema, pero tenga en cuenta que las cubiertas de plástico o algodón pueden retener la humedad y estimular el crecimiento de moho. Además, independientemente del tipo de cubierta, estas siempre ayudan a inhibir nuestras inspecciones periódicas evitando detectar infestaciones de plagas y otros problemas fácilmente visibles con el carruaje al descubierto.

Pero si son necesarias las cubiertas individuales en un carruaje, el mejor material para usar es un producto moderno de envoltura como los que se utilizan en el área de la construcción. Estos se pueden coser, grapar y también lavar. Además, estos tipos de materiales tienen la facultad de ser “transpirables” mientras mantienen el polvo fuera del carruaje.

Otra interesante opción sería cubrir el carruaje que se almacena en un establo o en un garaje con   una “tienda de campaña” construida sobre un marco en forma de caja con las paredes y parte superior formadas por tiras grabadas, dejando una tapa o puerta que se pueda abrir para llegar al carro para limpiarlo.

Finalmente recuerde no utilizar nunca lonas o envoltorios de plástico para cubrir el carruaje porque retienen la humedad.

Mantenimiento

contra las plagas

Insectos: muchos insectos, especialmente las polillas, pueden destruir las partes textiles de nuestro carruaje. Una forma de determinar si hay una infestación de insectos y, si es así, qué tipo de insectos son, es colocar trampas de insectos pegajosas alrededor de de los carruajes y ver qué atrapan. Aunque existen gran cantidad de pesticidas en el mercado para luchar contra estas plagas, el mejor consejo que podemos dar para evitar que los insectos destruyan nuestros tejidos es mantener en nuestros coches de caballos una la limpieza exhaustiva.

De todas maneras, si hay evidencia de una infestación de polilla en los asientos u otra tela removible, lo mejor que se puede hacer es “quitar y aislar”.

Retire y coloque las posibles partes infestadas en bolsas plásticas de alta resistencia junto con tiras atrapa insectos y selle las bolsas herméticamente. Aísle las bolsas en un congelador vertical o colóquelas al aire libre si la temperatura está por debajo de cero. Debido a que las polillas pueden permanecer latentes, la congelación debe alternarse con la aspiración y la descongelación.

Finalmente, para ayudar a prevenir nuevas infestaciones, asegúrese de poner en cuarentena los vehículos recién adquiridos hasta determinar que están libres de insectos.

Roedores: los ratones y otros roedores a menudo anidan en el relleno de los asientos, detectándose fácilmente al marcar su territorio con orina. El uso venenos matarán fácilmente estas plagas, pero si un roedor se esconde en algún lugar dentro o cerca del carruaje antes de que muera, sus restos puede crear un olor desagradable y convertirse en una fuente de alimento para otras plagas.

El mejor consejo que podemos dar para eliminar del área donde guardamos nuestros carruajes de los ratones es usar muchas trampas, especialmente durante la temporada de apareamiento a principios de otoño: cuantas más trampas, mayor es la tasa de éxito.

El mejor consejo que podemos dar para eliminar del área donde guardamos nuestros carruajes de los ratones es usar muchas trampas, especialmente durante la temporada de apareamiento a principios de otoño: cuantas más trampas, mayor es la tasa de éxito.

Los ratones se mueven a lo largo de los perímetros, así que asegúrese de colocar las trampas a lo largo de las paredes perimetrales. Una vez que se ha activado una trampa, tire la trampa y el ratón.

Finalmente ¡no olvide retirar todos los alimentos de las canastas de picnic una vez guarde su carruaje!

Finalmente, para ayudar a prevenir nuevas infestaciones, asegúrese de poner en cuarentena los vehículos recién adquiridos hasta determinar que están libres de insectos.

Mantenimiento

de humedades y temperatura

La humedad ideal para guardar sus carruajes es de entre el 48 y el 52 por ciento. El termómetro para medir la temperatura y la humedad se debe colocar en una pared alejada de la puerta de entrada.

Si la cochera en la que guardamos nuestros carruajes se calienta, puede hacer que la humedad relativa sea muy baja (por debajo del 45 por ciento), haciendo que la madera del carruaje pierda su contenido de humedad y provocando una contracción que puede causar grietas en diferentes partes de nuestros coches de caballos (especialmente en los paneles). Además, si la madera se encoge mucho más que la pintura, la pintura puede abultarse y doblarse.

Una solución a estos problemas es mantener la temperatura baja y usar siempre un humidificador.

Cuando la humedad relativa es muy alta (más del 60 por ciento), la madera se puede expandir mucho más que la pintura y provocar también grietas. Otro problema que puede ocurrir en ambientes de alta humedad es el crecimiento del moho. Este se alimenta de las superficies pintadas y barnizadas, así como del cuero y telas. Una solución a estos problemas es usar un humidificador y un ventilador.

Una cochera sin calefacción con un sótano y un ático puede ser una instalación de almacenamiento ideal. Los carruajes se pueden almacenar en el nivel medio sobre un piso de madera, permitiendo, de esta manera, que la temperatura y los cambios de humedad sean más graduales.  Recuerde que cualquier cambio dramático en la temperatura y la humedad puede hacer que los paneles del vehículo se agrieten.

Los ventiladores (extractores, de techo o de pared) pueden reducir las temperaturas y mejorar las condiciones ambientales para guardar los coches de caballos.

Finalmente, tenga en cuenta que las rejillas de ventilación de los extractores deben tener un filtro fino para evitar cualquier infiltración de insectos.